La terapia psicológica es un tratamiento al que muchas personas acuden en búsqueda de respuestas a una situación, es un método de apoyo que proporciona herramientas para solucionar algunos problemas.
Sin embargo, por desconocimiento, existen quienes se niegan asistir con estos profesionales de la salud mental, pues creen erróneamente que para asistir a estas terapias se debe estar loco.
Pero nada más lejos de la verdad, y en estas líneas te contamos cuáles son los motivos por los que puedes buscar ayuda o asistir a terapia psicológica.
¿Qué es la terapia psicológica?
Es un tratamiento de colaboración basado en la relación entre una persona y el profesional de la psicología; el cual consiste en un diálogo, en una conversación abierta con el objeto de buscar solución a un problema determinado.
En el proceso se proporciona un ambiente de apoyo neutral e imparcial en el que el profesional de la psicología escucha atentamente al paciente.
Luego, éste le brinda las herramientas que le ayuden a afrontar, manejar, superar o prevenir aquellos problemas o situaciones difíciles, tanto internas como externas, que hacen que la persona se sienta mal.
Motivos para asistir a terapia
Generalmente la terapia psicológica se centra en la evaluación, diagnóstico, tratamiento, prevención de recaídas y seguimiento de los trastornos o problemas psicológicos (depresión, ansiedad, obsesiones, personalidad, problemas de pareja, problemas sexuales, etc.).
También se puede ir a terapia en búsqueda de asesoramiento para manejar, afrontar, superar o prevenir problemas personales, crisis, conflictos, situaciones difíciles, malestares emocionales, enfermedades, etc.
En este sentido, es clave aprender que buscar ayuda no es sinónimo de debilidad, todo lo contrario, esto es altamente beneficioso porque te permite enfrentar la situación y resolverlo de manera oportuna.
Por tanto, asiste a terapia psicológica si crees que necesitas:
– Ser escuchado.
– Aprender a manejar y expresar las emociones.
– Darte un espacio.
– Tomar conciencia de algo en particular.
– Encontrar respuestas.
– Mejorar tu bienestar emocional.
– Conocerte y comprender situaciones.
– Afrontar situaciones.
– Superar un temor.
– Después de sufrir una pérdida (duelo, trauma, separación, enfermedad).
Con información de Diario 2001
